Henrique
Lazo
Si
bien es cierto que la literatura -en su sentido mas amplio- es todo lo que se
ha escrito, desde un graffiti hasta Don Quijote. La literatura hispanoamericana
ha sido una literatura de servicio, hecha para trabajar por algo mas que la
pura expresión literaria, con un programa social y con un programa político.
También
es innegable, que la literatura en su acepción mas excelsa es capaz de generar
un estado como de ensoñación, que produce significados mas profundos, con los
mismos caracteres con los que nos comunicamos los mortales diariamente.
El
cine, al igual que la literatura, ha transitado esos caminos. Tiene en las
películas de largo metraje lo que la literatura en las novelas.
Los filmes se han convertido en experiencias similares a las expresiones literarias con la diferencia de que en la literatura, la imaginación la pone el lector; en el cine, el director.
Los filmes se han convertido en experiencias similares a las expresiones literarias con la diferencia de que en la literatura, la imaginación la pone el lector; en el cine, el director.
Y
la cinematografía, que comenzó en Inglaterra con Muybridge y en Francia con los
hermanos Lumière, se ha convertido en una herramienta fundamental para
comprendernos mejor.
Así
como la pintura, la escultura, el teatro y la música, nos dieron una idea de lo
que fue el hombre en distintas épocas pasadas. En el siglo XX, el cine es el
mejor “disco duro” o memoria colectiva, para saber lo que pasó y lo que está
pasando.
El
período que comprende desde el estreno de la película “El Padrino” en 1972 -el
mayor “home movie” de la historia del cine- hasta la proyección en 1988 de
“Tucker”, podría bien llamarse: la época de Francis Ford Cóppola, brillante
cineasta norteamericano que logró conciliar la estética del cine europeo con la
cadencia de la narrativa norteamericana.
Desde
Elia Kazan, director de “Al Este del Paraíso” y –víctima de lo que se llamó en
1952 “el McCarthysmo” o la persecución del artista por sus ideas, no habían
aparecido en los Estados Unidos, filmes como “La Conversación” y “Apocalipsis
ya”, que pudieran poner fin al oscurantismo.
''Tucker''
- THE MAN AND HIS DREAMS 1988 - cuenta la historia de un inventor
del sector automotriz que con un pequeño equipo y el apoyo de su mujer y sus
hijos, emprende la tarea de fabricar el automóvil del futuro
-independientemente de los grandes constructores de Detroit-.
Terminó en la ruina tras construir en 1947 el vehículo capaz de revolucionar la industria automotriz. Un visionario en la corte de las transnacionales.
Es el relato de un hombre y su sueño, diferente al sueño de la lotería que es el de hacerse rico de la noche a la mañana.
.
que bueno te quedo este guariche lazo, te invito a que leas los mios, son mas humildes que los tuyos, pero estan a la orden
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarYo tengo un sueño, voy tras el..! Tu tienes el tuyo o ya lo cumpliste?..
ResponderEliminarGracias por compartirnos tus lineas!
Abrazo!
Hola henrrique me gusto mucho
ResponderEliminarbrutal... no hay palabras.....
ResponderEliminarAmigo estoy tratando de promover una campa;a nacional para promover la tolerancia en venezuela... Me gustaria contar con tu ayuda...! (sin fines de lucro)
ResponderEliminarVivo en Australia, tratando de conseguir ese sueño q lamentandolo mucho mi tierra querida no me pudo dar, y no salgo pa clase antes de leer el guariche...!! buenazo el de hoy... Saludos desde por aca!
ResponderEliminarViejo la historia de Preston Tucker... es brutal... solo logro construir 50 unidades, pero lo hizo... tremenda pelicula una de mis favoritas. Felicitaciones tremendo guariche
ResponderEliminarOye quien tuviera el valor de seguir esos sueños hasta que nadie comprenda ni nada te quede sino ese sueño cumplido! Que bonito con Lazo y todo!
ResponderEliminarprojundooooooo, en fin soñar en cada uno de nosotros siempre sera diferente y con un fin distinto, ahy quienes soñamos dia a dia como construir nuestras vidas de acuerdo a las metas, o que sencillamente soñamos con lo que quisieramos tener y no tenemos, o mejor aun soñamos porque es una forma de relajarnos, en fin soñar no cuesta nada....
ResponderEliminary mejor mi querido lazo, como dice mi amiga MARIANELLA (@lmarianellacn) esperaremos el guariche dia a dia para volver a soñar con nuestros sueños..
ResponderEliminar